¡YA BASTA!

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Ya Basta

“No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente” – Virginia Woolf

Que gusto saludarte de nuevo, en este nuevo artículo, decidí comenzar con esta frase porque me parece excelente para el tema que abordare hoy, siempre recuerda querida y querido lector, que nadie puede imponernos limites en cuanto a nuestros pensamientos y conocimientos, nada ni nadie nos los puede arrebatar, son plenamente nuestros, en la medida que los vayamos adquiriendo y desarrollando.

Como ya he mencionado en artículos anteriores, hay veces, en las que debemos de detenernos un momento a observar nuestro alrededor y reflexionar ¿Por qué hacemos lo que hacemos? ¿Por qué decimos lo que decimos? ¿Por qué pensamos lo que pensamos? Es claro que somos producto de lo que vivimos.  Prestando atención a “pequeños detalles” es como me pude percatar de un evento bastante incómodo y molesto. Un profesor, hace tiempo, al estar dando una explicación en clase con palabras más, palabras menos, comentó: “Empresas y gobierno que tengan a chicas sin rasgos de guapura trabajando en buenos puestos, es porque ellos si valoran el trabajo”. Esta frase a mi parecer es bastante confusa, en primera ¿Qué son rasgos de guapura? ¿Mujeres altas o bajas? ¿Morenas o piel clara? ¿Cabello obscuro o cabello claro? En segunda ¿Solo las mujeres que no tienen “rasgos de guapura” son las capaces para ocupar buenos puestos? ¿y las que “tienen rasgos de guapura” no lo son? Tantas dudas que inundan mi mente en ese momento; a mi parecer, la frase está cargada de contextos culturales, discriminatorios, machistas y hasta se podría interpretar sexuales. Pero lo mas sorprendente es ver que a mi alrededor no pasaba nada, el comentario fue normal para la gente que lo escuchaba.

Y por eventos así a lo largo de mi vida es que digo: “YA BASTA”, ya basta de que las mujeres nazcan tratando de probarle al mundo que tienen capacidad, inteligencia y trabajo, no solo su “físico”, ya basta del acoso callejero, ya basta de acoso laboral, ya basta de las violaciones, ya basta de feminicidios y que aparte de todo, se le culpe a la víctima, ya basta de la violencia doméstica, ya basta de prohibirle a las mujeres sus derechos sexuales y reproductivos, ya basta callar, vamos a gritar y exigir lo que es nuestro y nunca debió de haber sido arrebatado.

Hoy te hablo a ti persona, no estás sola, hay mucha otra gente que desea que esto se erradique, no, no entraste a la locura, no, no estas exagerando, no, ¡No es normal! Siempre recuerda que hay muchos más que piensan igual y pondrán día día un granito de arena para equilibrar la balanza.

Dedicado a mi noble e inteligente amiga Mariana Peralta.

 

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